Paso 1. Registro
Civil
La autorización necesaria para la celebración de un matrimonio
legal corresponde, por tanto, al Sr. Juez encargado
del Registro
Civil. El primer paso, por tanto, será dirigirse al Juzgado de
la localidad dónde se encuentre empadronado y tenga su residencia habitual, uno de los dos interesados (si son ciudades distintas, podéis elegir la que más os convenga de las dos). Allí, en el
Registro Civil, será donde deberéis entregar toda la documentación requerida y recoger posteriormente el expediente tramitado. Conviene hacer estos trámites con tiempo por si surgiera cualquier
contratiempo, pero teniendo siempre en cuenta que también se establece una caducidad para la documentación tramitada, de 6 meses.
La presentación de los documentos en el Registro Civil, la puede realizar cualquier
persona, siempre que los documentos estén firmados por ambos contrayentes.
Necesitaréis dos testigos, que no tienen por qué coincidir con los testigos que
elijáis en la boda (día de la celebración). El juez y el fiscal, verificarán y comprobarán toda la documentación y os darán la autorización que necesitáis para entregar en el Ayuntamiento o Junta
Municipal que oficiará vuestro matrimonio.
Paso 2. Celebración
matrimonio
Los trámites previos se tienen que realizar en el Registro
Civil correspondiente, pero para realizar la ceremonia nupcial, los contrayentes pueden elegir la Junta Municipal o Ayuntamiento que deseen. El Código Civil español, autoriza a cualquier juez,
alcalde o funcionario autorizado del país para oficiar el acto. Incluso, se puede oficiar en el extranjero en cuyo caso se deberá remitir el expediente al Consulado de España en el país de la
celebración.
Si optas por una celebración en el juzgado, te casará el
Juez de Paz. Si tu elección es en un Ayuntamiento, podrá casarte un concejal, funcionario competente o el propio alcalde, en las dependencias municipales destinadas a tal fin.
Muchos Ayuntamientos sólo aceptan celebraciones de Lunes a
Viernes, pero por ejemplo el Ayuntamiento de Soria acepta oficiar bodas también los fines de semana por la mañana (las tasas varían dependiendo del día y hora elegidos). Puedes conocer dichas
tasas, aquí.. Si te casas en otra localidad de la provincia, habla directamente con el Ayuntamiento del Municipio y ellos te darán las opciones. Te
dejamos aquí los teléfonos de contacto de
todos los municipios...
Es requisito imprescindible, presentar ante el Ayuntamiento
la autorización previa que ha dado el Juez para la celebración del matrimonio. Por ello, una vez iniciado el expediente en el Juzgado o Registro Civil, podéis dirigiros al Ayuntamiento y
solicitar fecha y hora para la celebración de vuestra boda. (Aquí
puedes descargarte la hoja de solicitud de Ayto. de Soria) Y abonar las tasas correspondientes. Deberéis también, entregar vuestra identificación personal (DNI o
documento oficial) tanto de los contrayentes como de los dos testigos que acudan el día de la celebración
Pero, a mi me gustaría hacer la celebración en los jardines que nos ofrece el restaurante ¿es
posible?
En principio, no se puede celebrar el acto "oficial" en
casas o fincas particulares, ya que los "documentos oficiales" no deberían salir de ayuntamientos o juzgados, así como los concejales sólo pueden oficiar el acto en el municipio al que
pertenecen. Hay ocasiones, en las que el alcalde o juez de la localidad en cuestión, por cercanía y/o compresión pueda acceder a oficiar la ceremonia fuera de las dependencias oficiales, pero no
es lo más común.
Por esta razón, en la mayoría de los casos, las parejas
optan por realizar el acto oficial en la Sala Municipal correspondiente, y posteriormente, llevan a cabo un segundo acto (no oficial) en el recinto que elijan. Lo más normal, es que las parejas
se casen "oficialmente" algún día antes de la fecha prevista para la celebración particular (no oficial) en la que los novios se juntan con todos sus invitados.
En esta segunda celebración, se suele repetir un protocolo
similar al que se ha llevado a cabo en la Sala Municipal o Juzgado, al que se le añade música, lecturas, las intervenciones de familiares y amigos, o cualquier otro acto que los novios o
invitados deseen. Es una celebración de caracter mucho más informal y abierta a la imaginación, dando lugar a momentos muy emotivos y bonitos.